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Comunicaciones del 44º Congreso de Neumosur

IMPACTO EN LA CALIDAD DE LAS ESPIROMETRÍAS DE ATENCIÓN PRIMARIA TRAS UNA INTERVENCIÓN INDIVIDUALIZADA

Autores

A. Hidalgo Molina, J.A. Córdoba Doña, M. A. Luque Barea, A. León Jiménez

Introducción

Diversos estudios han valorado la calidad de las espirometrías realizadas en Atención Primaria (AP) mediante encuesta telefónica sin valorar la calidad técnica. El objetivo de nuestro estudio es conocer la aceptabilidad de las espirometrías en AP y si una intervención simple puede mejorar su calidad.

Metodología

El Distrito Bahía de Cádiz-La Janda dispone de 23 Centros de Salud (CS) y atiende a una población de 510.000 habitantes. En 2016 se solicitó a cada CS 10 espirometrías elegidas al azar. Las espirometrías fueron analizadas por un neumólogo y tras ello se remitió, a través del Distrito de AP, una carta personalizada a cada CS indicándoles los errores cometidos y áreas de mejora. Además, se ofrecía posibilidad de entrenamiento individualizado en las unidades de Neumología del área. Un año después, en 2017 se volvieron a solicitar 10 espirometrías por CS y se procedió a su análisis. El análisis de las espirometrías se basó en los criterios de aceptabilidad de la SEPAR de 2013. Se clasificaron los errores en 3 grupos: (1) al inicio de la prueba (volumen de extrapolación retrógrada mayor a 150 ml o 5% de la FVC), (2) en el transcurso (presencia de artefactos), y (3) en la finalización (duración menor de 6 segundos y/o finalización brusca). Consideramos como aceptables las espirometrías sin errores. Se utilizó el test de comparación de proporciones para muestras independientes en el análisis.

Resultados

En 2016 se recibieron un total de 170 espirometrías. De ellas 43 espirometrías (25,3%) fueron aceptables y el resto presentaba uno o varios errores. 9 espirometrías (5,3%) tenían errores al inicio de la prueba, 60 (35,3%) en el transcurso de la misma y 108 (63,5%) en la finalización. En 2017 se recibieron 246 espirometrías, 136 de ellas (55,7%) fueron aceptables. En 2 (0,8%) espirometrías existían errores al inicio, en 25 (10,2%) en el transcurso y en 104 (42,3%) en la finalización. El número de espirometrías con dos errores disminuyó significativamente. La proporción de espirometrías correctas en 2017 fue significativamente mayor que en el 2016 con una p<0,0001 y una diferencia del 30,4% con IC95 (21,4%-39,4%)

Conclusiones

La calidad de las espirometrías realizadas en los CS mejora significativamente tras la realización de una intervención individualizada. El error más frecuente sigue siendo la mala finalización de la técnica fundamentalmente por una espiración menor a 6 segundos.

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